Barcelona es una ciudad con mucha historia y tradición, y esto se refleja también en sus subastas. Si estás interesado en participar en una subasta en Barcelona, aquí te explicamos dónde y cómo hacerlo.
Historia de las subastas en Barcelona
Barcelona ha sido siempre una ciudad comercial, y las subastas han formado parte de su actividad económica desde hace muchos siglos. La tradición se remonta al año 987, cuando se celebró la primera subasta pública de la ciudad. En aquel entonces, se subastaban productos agrícolas, pero con el tiempo fueron apareciendo otras mercancías, como vino, tejidos, libros, muebles, etc.
En la Edad Media, las subastas se realizaban en el Llotja de Mar, un edificio construido específicamente para albergar este tipo de actividades. En la actualidad, el Llotja sigue siendo el lugar donde se celebran las subastas más importantes de Barcelona, aunque también hay otras salas de subastas en la ciudad.
Cómo funcionan las subastas en Barcelona
Las subastas en Barcelona se rigen por unas normas muy específicas. En primer lugar, es necesario registrarse en la sala de subastas donde se va a participar. A continuación, se le asignará un número de paddle, que es el que se utilizará para hacer las pujas.
Para hacer una puja, simplemente hay que levantar el paddle cuando el precio llegue al nivel deseado. Si se hace una puja errónea, por ejemplo, si se pide un precio demasiado bajo, se puede retractar de ella antes de que el martillo caiga. Una vez que se ha hecho una puja, ya no se puede retractar.
El martillo es el objeto que se utiliza para cerrar las subastas, y suele estar en manos del presidente de la misma. Cuando el precio llega al nivel deseado, se levanta el martillo y se da por finalizada la subasta. El comprador deberá abonar el precio acordado, más una comisión que suele oscilar entre el 10% y el 20%.
Dónde participar en subastas en Barcelona
Como hemos mencionado, Barcelona cuenta con varias salas de subastas. La más importante y prestigiosa es la Llotja de Mar, que se encuentra en el antiguo barrio marinero de la ciudad. En la Llotja se celebran las subastas más importantes, como la de vinos del Celler Can Roca o la de joyas de la Casa de Subastas Pérez-Llorca.
Otra de las salas de subastas más prestigiosas de Barcelona es la Casa de Subastas Fortuny. Esta sala se especializa en subastar obras de arte, y en ella se han vendido algunas de las pinturas más caras de la historia, como la «Mona Lisa» de Leonardo da Vinci.
Por último, también merece la pena mencionar la Casa de Subastas Tasende, que se especializa en joyas y relojes. En esta sala se han vendido algunas de las piezas más valiosas del mundo, como el «collar Hope» de la duquesa de Windsor.
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